El fervor por la llegada de Leo Messi se trasladó este miércoles del aeropuerto y el estadio a la tienda en la que se vendió su camiseta con el número 30 en el dorso. GRA445. MADRID, 23/04/2017.- El delantero argentino del FC Barcelona, Leo Messi, celebra el gol de la victoria ante el Real Madrid, durante el encuentro correspondiente a la jornada 33 de primera división, que han disputado esta noche en el estadio Santiago Bernabéu, en Madrid. El partido inició con gol de Casemiro a los 18 minutos, pero el salvador del siempre, Lionel Messi, empataba el marcador cinco minutos después. Lionel Messi es esperado este lunes en París para definir los detalles de su futuro contrato con el Paris Saint Germain, anticipó la prensa deportiva de Francia. Este martes el especialista en la economía del Barça y director generalde Diagonal Inversiones, Marc Ciria, explicó a EFE que la entidad está apostando mucho por Memphis Depay comercialmente y que él «podría llegar a vender 5 de cada 10 camisetas y así evitar que la caída de las ventas fuese más allá del 30% a corto plazo».
Esto último estará supeditado a lo que ocurra con las eliminatorias, ya que si la Conmebol oficializa que se agrega una tercera fecha a la ventana de ese mes por los partidos pendientes de Argentina con Brasil y Uruguay (las dos primeras serán el 2 y 7), ese día el seleccionado enfrentará a su vencido en la final de la Copa América. De acuerdo a diversos sitios de hotelería, la noche de hospedaje en el Le Royal Monceau -hotel en el que se hospedará Messi durante las primeras semanas- cuesta 97.000 pesos argentinos, otro cuantioso precio en la nueva vida del 10 de la Selección. La instantánea no tardó mucho tiempo en expandirse por las redes sociales y, a juzgar por las imágenes, se trata de una venganza por el gol que anotó Lionel Messi en el Santiago Bernabéu en el pasado mes de abril y que el argentino celebró de la misma manera. Fekir, de 24 años, despertó la ira de los hinchas del acérrimo rival de su equipo al imitar el gesto de Messi el pasado abril en el estadio Santiago Bernabéu, donde celebró el gol que dio el triunfo al Barcelona ante el Real Madrid despojándose de la camiseta y mostrándola en alto a los seguidores madridistas.
Al portugués le dieron cinco fechas de suspensión y en las redes sociales se viralizó rápidamente la foto del delantero mostrando su camiseta tal y como lo había hecho Messi en abril en el Santiago Bernabéu. El diario Marca ha recogido las últimas celebraciones enseñando la camiseta de Messi y Cristiano, y ha intentado buscar el origen de esta celebración en España. Después fueron Messi y Crisitano los que la popularizaron. Al margen de las polémicas arbitrales y de la contundente victoria del Real Madrid, tras el encuentro había una foto que todo el mundo buscaba, la del portugués Cristiano Ronaldo mostrando su camiseta a los hinchas del FC Barcelona en el Camp Nou. La celebración de Cristiano Ronaldo en el Camp Nou hizo recordar al festejo reciente de Messi en el Santiago Bernabéu, pero quien realmente hizo ese gesto por primera vez fue Ronaldinho hace muchos años. Pero antes de que Cristiano Ronaldo levantara la polémica, y mucho antes de que Lionel Messi le muestre su camiseta al Bernabéu, hubo alguien quien se les adelantó a ambos: nada más y nada menos que el propio Marcelo. El portugués, que aparentemente se había quedado con la sangre en el ojo por el último clásico, se tomó revancha y festejó igual que Lionel Messi: se sacó la camiseta y se la mostró a los hinchas.
Mientras que el Paris-Saint Germain se apresta a ser el beneficiado de la emotiva ruptura de Lionel Messi con el Barcelona, existe al menos otro club que mantiene sus esperanzas de hacerse con los servicios del agente libre más cotizado del balompié mundial. Messi tiene unos 245 millones de seguidores en Instagram, más del doble que los de la cuenta oficial del FC Barcelona, que roza los 100. Esto es un ejemplo de que a nivel mundial «hay muchos fans que son más de Messi que del Barça» y «gran parte de ellos se hará del equipo donde vaya Messi», apunta Ciria. Una parte del Coliseum la tomó contra Griezmann cuando el francés celebró el 0-2 besándose en repetidas ocasiones la ikurriña de la camiseta de la Real Sociedad. Que el argentino vaya a lucir el 30 es gracias a una excepción reglamentaria que ha abierto la Liga francesa, y es que estos suelen reservar determinados dorsales para los porteros. A su lado, el portugués asiente: «Sí, el clásico en el que Messi se quita la camiseta y la enseña a la grada». Por otro lado, hace unas semanas la agencia de calificación Fitch dio un triple B negativo al Barcelona, noticia que fue recibida con alegría en el club porque le allana el camino para refinanciar su deuda hasta los 525 millones de euros bajo la tutela de Goldman Sachs.
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